PREGUNTA: ERRORES EN EL ADIESTRAMIENTO CANINO. ¿ A QUÉ SE DEBEN?
RESPUESTA: Hay errores en el adiestramiento canino porque, frecuentemente, se parte de una filosofía equivocada.
Sin duda. Es aún más importante la filosofía con la que nos enfrentamos al adiestramiento que la técnica con la que lo llevemos a cabo.
Lo que realmente deseamos con el adiestramiento canino es que el perro se comporte a diario como debe. Que esté tranquilo, que no nos moleste y que no moleste a nadie.
Los ejercicios que enseñamos a nuestro no son sino recursos para que obre en sociedad de una determinada manera. Bien. Siempre.
Que nuestro perro sea educado nada tiene que ver con que sepa muchos trucos.
Sin embargo tiene que aceptar que hay conductas permitidas y prohibidas. El “siempre” y el “nunca” no resultan tan difíciles de entender. El “a veces” destruye la obligatoriedad de la rutina y frecuentemente conduce al “cuando me apetece”.
Los problemas de conducta del perro son consecuencia directa de una filosofía equivocada. De un enfoque erróneo.
Por supuesto que el adiestramiento es importante. Pero es sólo el punto de partida. Lo realmente fundamental es que seamos consecuentes, que asumamos que si a veces permitimos que ocurran situaciones inconvenientes puede que el control de nuestro perro se nos vaya de las manos.
Un perro educado es delicioso. Con un perro educado podemos realizar muchas y variadas actividades: pasear, desayunar en una terraza, hacer deporte… Un perro maleducado, en cambio, nos amarga la vida.
Tengamos claro que es nuestra responsabilidad ser sistemáticos. Con tener claros cuatro conceptos y dejárselos claros a nuestro perro disfrutaremos ambos de la relación perfecta.
- Tranquilidad
- Ductilidad
- Indiferencia al entorno
Parece fácil, ¿verdad?.
Pues lo es.
Sólo tenemos que ser coherentes. Y firmes. Para establecer normas. Siempre las mismas.
Así, nuestro perro siempre se comportará como deseamos.
Y recordemos que : ¡Un perro educado es un perro feliz!